LA FELICIDAD O LA FALTACIDAD. La Felicidad ¿Por qué la perseguimos si es una ilusión?

La Felicidad ¿Por qué la perseguimos si es una ilusión?

El instante de alegría al que llamamos "felicidad" es tan efímero que pasa a formar parte del pasado, sin que apenas nos demos cuenta.

Es por este motivo que la supuesta felicidad queda entre el terreno del pasado, donde habitan los recuerdos y la nostalgia, y el terreno del futuro, al que pertenecen el deseo y la esperanza.

LA FELICIDAD O LA FALTACIDAD. La Felicidad ¿Por qué la perseguimos si es una ilusión?

Proyectamos nuestros deseados momentos felices hacia el futuro: ¿los logros del presente serán el preludio de una futura felicidad? ¿O una eterna promesa que nunca se hará realidad?

La vivencia de "felicidad" se nos escapa y solo podemos reproducir aquel momento de disfrute en el recuerdo. La alegría por haber logrado un éxito pronto se desvanece y en el horizonte aparecen nuevos objetivos, nuevos retos.  

Los nuevos objetivos vienen acompañados de nuevas inquietudes y, sin que podamos evitarlo, el sentimiento próximo a la felicidad evoluciona se transforma y a veces, se trunca.

Como dice el poeta William Wordsworth en "Oda a la inmortalidad": nada nos puede devolver el esplendor en la hierba de la gloria de las flores, refiriéndose a los momentos de plenitud vividos en la juventud.

Sigmund Freud se remonta, no ya a la etapa de la juventud si no a la de la infancia: el bebé que siente calmar su malestar (hambre)  cuando la madre le da el alimento tiene la experiencia primaria de felicidad..

El escritor Gabriel Rolón habla de ello ampliamente en su libro "La felicidad". Aquí solo quiero señalar que Freud la llama "experiencia primaria" porqué es la primera vez en la vida del niño o niña que ve su necesidad satisfecha. 

Gabriel Rolón – La felicidad 

Esta vivencia dejará un recuerdo, una huella. A partir de este momento, buscará repetir la experiencia pero ésta ya no volverá a ser igual. La diferencia entre aquello que espera y aquello que verdaderamente encuentra, da lugar al deseo. El deseo es lo que nos impulsa a seguir buscando, el deseo es lo que mueve el mundo.

Deseamos porqué nos falta algo. Por este motivo, el autor y psicoanalista Rolón dce que, en lugar de hablar de "felicidad", deberíamos hablar de "faltacidad",  ya que siempre nos faltará algo..

El mensaje engañoso de que los sueños se cumplen

Al ser humano le cuesta aceptar que no lo puede tener todo. A menudo nos llega el mensaje de que "los sueños se cumplen", pero desgraciadamente no es así: muchos sueños se quedan por cumplir y siempre añoraremos o desearemos algo más.

Quizás nos acerquemos a lo que deseamos, quizás tengamos algún instante de 'felicidad", pero siempre será obviando una parte de la realidad que podría menoscabarla. El momento de "felicidad" requiere un enfoque parcial y siempre será efímero. 

¿Y si dejamos de buscar la felicidad?

Tal vez nos podamos plantear desistir de este anhelo de conseguir algo tan inalcanzable como la "felicidad". 

Tal vez podamos buscar objetivos más viables, que en alguna medida dependan de nosotros. Y enfocarnos en que cada paso, por pequeño que sea, guarde coherencia con lo que pensamos y sentimos y, sobretodo, que aporte sentido a nuestras vidas.

Quién sabe si, de manera indirecta y sin buscarla, ¡nos llega una chispa de felicidad!.